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La notable omisión de Aranguren respecto de los subsidios energéticos

Autor | Belen Ennis


Conflictos de Interes
La autora no manifiesta conflictos de interés


Palabras Claves
Aranguren, CEDLAS, Diputados, electricidad, energía, FMI, gas por redes, Jorge Puig, Leandro Salinardi, progresividad, subsidios, subsidios a la energía, tarifazo, UCA



29-08-2016 | En su alocución en Diputados, el Ministro de Energía y Minería de la Nación, Juan José Aranguren, aseguró: "Hay mayor subsidio para los ricos y menor para los pobres". Semejante aseveración encuentra su origen -según explicó el accionista de la Royal Dutch Shell ante las distintas comisiones de la cámara parlamentaria- en un estudio realizado por el CEDLAS (Centro de Estudios Distributivos, Laborales y Sociales) de la Universidad Nacional de La Plata denominado "Argentina y los Subsidios a los Servicios Públicos: Un Estudio de Incidencia Distributiva". Dicho informe demostraría que la política de subsidios, y especialmente los vinculados a la energía, terminan beneficiando a los sectores de ingresos más altos. Sin embargo, OETEC se tomó el trabajo de consultar la fuente utilizada por el Ministro de Energía y Minería de la Nación y se topó con un dato arbitrariamente omitido por el ex CEO de Shell. ¿Qué nos ocultó Aranguren y qué reconoce el CEDLAS? Y más importante aún: ¿Qué coincidencias hay entre el discurso anti subsidios de la administración nacional y la posición del FMI? El interrogante resulta clave no sólo de cara a las audiencias públicas donde la ciudadanía deberá defender sus propios intereses y desembarazarse de aquellos argumentos que implantados por el neoliberalismo en el "sentido común" le resultan contrarios a su seguridad jurídica, sino también para aquellos que desde la heterodoxia (política y periodística) plantean similares críticas a la política de subsidios sin comprender cabalmente el rol progresivo de los mismos (mucho menos su lesivo rol de defensores y promotores de las recetas de ajuste del célebre organismo).


Supuesta regresividad de los subsidios
Exhibiendo un gráfico confeccionado por el mencionado centro de estudios, que indica cómo se distribuyeron los subsidios en el año 2014 entre los distintos deciles de ingreso de las familias argentinas, Aranguren explicó que "en el caso de la electricidad el decil más pobre tuvo una participación en el total de los subsidios del 8%, y el decil más rico tuvo una participación en el total de los subsidios del 12%. Esto significa que hubo un mayor subsidio para aquellos que tenían mayores ingresos". En el caso del gas natural "la situación es aún peor" -remarcó Aranguren-: "En el decil más pobre, el subsidio era del orden del 4% del total, y en el decil más rico el subsidio por el consumo del gas natural era del orden del 21%".

Por ende y según el ministro de Energía y accionista de Shell, la política de subsidios hizo que "durante todos estos años el Estado nacional tuviera que requerir fondos para mantener este esquema de precios artificiales, lo cual significó más impuestos, más inflación y, obviamente, menos obras de infraestructura en salud y seguridad".

Interpretando al funcionario, los subsidios serían altamente regresivos no sólo porque benefician a quienes más dinero tienen sino también porque el Estado podría haber utilizado dichos egresos para la construcción de obras públicas como escuelas u hospitales.

Coincidencias con el FMI
Igual argumento maneja el Fondo Monetario Internacional para desestimar los subsidios a los combustibles fósiles. En su estudio publicado en 2015 "¿Qué tan grandes son los subsidios globales a la energía?", los especialistas David Coady, Ian Parry, Louis Sears y Baoping Shang critican los subsidios energéticos por considerarlos altamente regresivos -porque perjudicarían precisamente a los grupos de menores ingresos-. Brindan al menos tres razones. Primera: porque suelen favorecer a los mayores consumidores que son al mismo tiempo los de mejores ingresos y los que pueden acceder a la compra, por ejemplo, de electrodomésticos y vehículos. Segunda razón: porque el Estado direcciona un importante porcentaje de su presupuesto hacia dichos subsidios, descuidando otros elementos relevantes de la inversión pública, como la salud y la educación. Y tercera: porque los subsidios estimulan el consumo de combustibles fósiles y desincentivan la aplicación de tecnologías que controlen su efecto contaminante. Respecto de este último punto, la administración macrista también coincide con el FMI y son harto conocidas sus expresiones en contra del sostenimiento de los subsidios a los combustibles fósiles y a favor del fomento, prácticamente exclusivo, de las energías renovables eólica y solar. Desde nuestro Observatorio hemos expuesto oportunamente los argumentos que refutan la hipócrita posición del fundamentalismo ambiental.

La coincidencia del discurso anti subsidios a la energía entre el FMI y la administración macrista resulta más que importante, sobre todo para aquellos que desde la heterodoxia (política y periodística) plantean similares críticas a la política de subsidios sin comprender cabalmente el rol progresivo de los mismos (mucho menos su lesivo rol de defensores y promotores de las recetas de ajuste del célebre organismo).

El dato "olvidado" por Aranguren
Volvamos al informe del CEDLAS. ¿Qué dice el centro citado por el ministro Aranguren en relación a los subsidios a la electricidad? Citamos textual: "Se aprecia que el subsidio a la electricidad es progresivo mientras que resulta relativamente proporcional: es decir que las transferencias se concentran en todos los deciles de la distribución del ingreso de manera más o menos uniforme… Cuando se analiza el beneficio de estos subsidios en relación al bienestar, se aprecia un sistema de subsidios progresivos" (Págs. 5 y 11). Veamos ahora la opinión de los especialistas de referencia de Aranguren en materia de gas natural.

Explica el CEDLAS que "Los subsidios al gas pueden diferenciarse en tres grandes grupos: los subsidios destinados a las importaciones de gas, los subsidios al consumo de gas de red residencial, y los subsidios al consumo de gas envasado". Luego, agrega que "La evidencia confirma que los subsidios al consumo de gas de red son pro-ricos, mientras que los subsidios al consumo de gas envasado presentan un comportamiento inverso: pro-pobre. Por su parte, a la hora de analizar la incidencia relativa, las transferencias al consumo de gas de red se revelan progresivas, así como también aquellas destinadas al gas envasado. Si se agregan ambos tipos de subsidios, se obtienen los subsidios totales al gas. Al hacerlo, el resultado sostiene que su incidencia distributiva es pro-rica y progresiva, reflejando que el gas de red tiene una ponderación mayor en los resultados finales (pro-rico) y que el mayor caudal de consumo se realiza vía red y no vía gas envasado" (Págs. 9 y 10).

Ahora bien, obsérvese con atención las conclusiones finales del centro de estudios de la UNLP en informe citado por el accionista de Shell y ministro de Energía: "La principal conclusión que se alcanza sostiene que la mayoría de los subsidios analizados son pro-ricos (es decir, se concentran en términos absolutos en lo deciles más altos de ingreso)…". Hasta acá, una suerte de justificación para Aranguren y su libre mercadismo fondomonetarista. Sin embargo, las conclusiones no terminan allí. Transcribimos la frase completa: "La principal conclusión que se alcanza sostiene que la mayoría de los subsidios analizados son pro-ricos (es decir, se concentran en términos absolutos en lo deciles más altos de ingreso), y progresivos (como proporción de su ingreso, los estratos más bajos reciben relativamente más), coincidiendo con resultados previamente hallados por la literatura. Esta conclusión es robusta al uso de indicadores de bienestar alternativos (el ingreso per cápita familiar y el gasto per cápita familiar)".

Tal afirmación complementa perfectamente lo explicitado en la introducción del trabajo: "Excepto el caso de los pasajes aéreos, el resto de los subsidios sí son progresivos". Se refiere el CEDLAS a los subsidios a la energía (gas de red, gas envasado y electricidad), al agua y al transporte público de pasajeros (colectivo y tren).

En suma y en función de la definición de regresividad esgrimida por el mismísimo FMI, esto es, que los subsidios "perjudicarían precisamente a los grupos de menores ingresos", el hecho de que sean "progresivos" significa, ni más ni menos, que los subsidios cumplen uno de sus objetivos más básicos: beneficiar a los sectores más vulnerables de la población. Y como esta es una verdad de perogrullo, para comprobarla no hizo falta más que consultar las propias fuentes estadísticas que diera Aranguren en su interpelación en Diputados aunque, sorpresivamente, ese dato de índole fundamental se le haya pasado por alto. Al respecto, cabe recordar que el CEDLAS no puede ser tildado de kirchnerista en tanto fue el Banco Mundial quien convocó a dicho centro de estudios para auditar y monitorear las estadísticas de distribución en toda América Latina. Asimismo, su máxima autoridad, Leonardo Gasparini -Ph.D. en Economía por la Universidad de Princeton, Profesor de Posgrado de la Universidad Torcuato Di Tella y Premio Fulvio Salvador Pagani 2001 de la Fundación Arcor-, es referencia obligada para los diarios La Nación y Clarín.

Desde OETEC le recordamos al Sr. ministro que las próximas Audiencias Públicas serán un espacio más que oportuno para rectificarse. De paso bien sugerimos se aproveche la oportunidad para corregir idéntico mal uso por parte del Presidente Macri en su alocución del 1 de marzo sobre un informe de la UCA en materia de infraestructura de servicios públicos (ver bibliografía).



Bibliografia
CEDLAS. Jorge Puig y Leandro Salinardi (2015). "Argentina y los Subsidios a los Servicios Públicos: Un Estudio de Incidencia Distributiva".

"Reforma de los subsidios a la energía: El camino por delante" Presentación de David Lipton, Primer Subdirector Gerente, Fondo Monetario Internacional http://www.imf.org/es/news/articles/2015/09/28/04/53/sp032713

Boletín del FMI: "El FMI observa grandes beneficios en la reforma de los subsidios energéticos" http://www.imf.org/es/news/articles/2015/09/28/04/53/soint032713a

FMI How Large Are Global Energy Subsidies? (2015) https://www.imf.org/external/pubs/ft/wp/2015/wp15105.pdf

OETEC (11/08/2016) Por qué el FMI (y Macri) no quieren subsidios energéticos
http://www.oetec.org/nota.php?id=2009&area=14

OETEC (26/07/2016) Argentina: ¿Único país del mundo que subsidia la energía? El FMI desmiente a Lanata
http://www.oetec.org/nota.php?id=1965&area=1

OETEC (01/03/2016) Cloacas, agua corriente y gas: vergonzoso "error" del Presidente Macri
http://www.oetec.org/nota.php?id=1611&area=14