Medicina Nuclear y cuestión nacional
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha definido a la Medicina Nuclear como la especialidad que se ocupa del diagnóstico, el tratamiento y la investigación medica mediante el uso de radioisótopos como fuentes abiertas. Los estudios de Medicina Nuclear se llaman "gammagrafías" o "centellogramas" -porque surgen del registro de la actividad de los rayos gamma en los órganos a estudiar, manifestándose por medio de centelleos o chispas- y se realizan con técnicas no invasivas (no quirúrgicas), inocuas y con mínimas dosis de radiación seguras y reproducibles. La Medicina Nuclear se asocia con eficacia en el procedimiento y ayuda a precisar qué paciente puede beneficiarse de la terapia médica y qué paciente requiere de una terapia quirúrgica. Además, permite detectar alteraciones mucho antes de que las enfermedades sean clínicamente detectables lo cual repercute significativamente en tratamientos tempranos más efectivos y pronósticos frecuentemente más favorables. Para llevar a cabo los estudios requeridos se inyectan, por vía endovenosa, sustancias radioactivas que se desintegran al correr por el flujo sanguíneo liberando energía que es rastreada por una cámara gamma. De esta manera, se conforma un "radioisótopo" que unido a un fármaco (radio-fármaco) va a dirigirse, según sus características, a diferentes órganos o tejidos.

Pero lo más importante de este tipo de tratamiento son sus ventajas: a) no es invasivo (no se requiere de cirugía, el corte de la piel u otros órganos); b) es funcional (a diferencia de la resonancia magnética y la ecografía que sólo pueden describir la "forma" de los órganos internos del cuerpo, la Medicina Nuclear tiene la ventaja adicional de presentar información valiosa sobre el "funcionamiento" de estos sistemas); c) no produce molestias durante la aplicación (la radiación, en si, es indolora para el paciente); d) posee un bajo nivel de radiación (las dosis de radiaciones, para el diagnostico, son similares o inferiores a otras técnicas radiológicas y cada día tienden a ser menores); e) rapidez en la entrega de información (siendo su aplicación fundamental en el área de urgencias).

Plan Nacional de Medicina Nuclear y las ENT
Teniendo en cuenta las ventajas reales que otorga el aprovechamiento de la energía nuclear para realizar tratamientos médicos se impulsó en nuestro país la creación del "Plan Nacional de Medicina Nuclear", el cual tiene como objetivo central dotar a la Argentina de las herramientas que la actividad nuclear posee para la prevención, el control y el tratamiento de las denominadas "Enfermedades Crónicas No Transmisibles" (ENT), en un marco de equidad social donde quede asegurada la accesibilidad de toda la población bajo una infraestructura y un equipamiento de alta tecnología y complejidad acordes a los estándares mundiales y con la formación y la capacitación de los recursos humanos profesionales y técnicos necesarios, contribuyendo a la generación de fuentes de trabajo genuinas para los mismos y al crecimiento y desarrollo de las regiones donde efectúan su labor.

Entre las ENT se encuentran las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, el cáncer y las enfermedades respiratorias crónicas. Todas ellas implican una creciente carga de mortalidad y morbilidad en todo el mundo; se estima que 6 de cada 10 muertes se deben a las ENT y que las mismas matan a más de 36 millones de personas cada año, concentrándose cerca del 80% en los países de ingresos bajos y medios. Los expertos creen que para el año 2030 más de tres cuartas partes de las muertes en el mundo serán consecuencia de las ENT y representarán el 66% de la carga de enfermedad.

En la Argentina, al igual que en el resto del mundo, dichas enfermedades representan la causa de defunción más importante. En este sentido, nuestro país se encuentra dentro del rango de países con incidencia de cáncer media-alta y los tumores malignos constituyen la principal causa de muerte, sobre todo entre los 40 y los 64 años. Al respecto se sabe que durante 2012 murieron 61.866 personas por cáncer, encontrándose en el primer lugar el de pulmón (14.9%), seguido por los de colon y recto (11.3%), los de mama (9%) y los de próstata (6.1%). En nuestro país la probabilidad de morir entre los 30 y 70 años debido a las cuatro ENT principales es del 17%.

En vistas del alto riesgo que representan este tipo de enfermedades, en Mayo de 2013, la Asamblea Mundial de la Salud (AMS) adoptó una resolución general para la prevención y el control de las ENT a la que la Argentina adhirió. Es así pues que el "Plan Nacional de Medicina Nuclear" demuestra el alto grado de compromiso político que el Gobierno Nacional tiene para con el control y la prevención de dichas patologías. Veamos entonces, cuáles serán las próximas inversiones del Estado en materia de medicina nuclear.

Inversiones en equipos y centros de medicina nuclear para todos los argentinos
Como destacábamos al comienzo de este trabajo, la medicina nuclear es una especialidad médica que emplea isótopos radioactivos (radioisótopos) unidos a moléculas específicas (radiofármacos) para el diagnóstico, tratamiento e investigación médica de las enfermedades. Pero para que el ciclo de producción de radioisótopos se lleve a cabo es necesario poner en funcionamiento un equipo llamado Ciclotrón, esto es: un acelerador circular de partículas (protones) que al impactar sobre un blanco producen reacciones nucleares creando nuevos radioisótopos que son la materia prima de los equipos utilizados para diagnóstico y tratamiento. A través de la Primera Etapa del Plan Nacional de Medicina Nuclear, se realizará una inversión estimada de AR$ 315 millones en ciclotrones para los centros de medicina nuclear.

Por otra parte, la medicina nuclear también emplea radiofármacos (recordemos: compuestos que contienen estos elementos radioactivos llamados radioisótopos y que al unirse a moléculas especificas permiten analizar diferentes funciones metabólicas que se originan en los órganos, los huesos o los tejidos). Y no puede haber radiofármacos sin laboratorios de radiofarmacia que reciban los insumos generados en el Ciclotrón y prepare los radiofármacos necesarios para llevar a cabo los estudios que se requieran. En consecuencia, a través de la Primera Etapa del Plan Nacional de Medicina Nuclear se realizará una inversión estimada de AR$ 210 millones en Laboratorios de Radiofarmacia.

Asimismo, para completar el proceso de generación de radioisótopos es importante realizar una Tomografía por Emisión de Positrones (PET) basada en una técnica no invasiva de diagnóstico e investigación por imagen capaz de medir la actividad metabólica del cuerpo humano. Al igual que el resto de técnicas diagnósticas en medicina nuclear, el PET consiste en detectar y analizar la distribución tridimensional que adopta en el interior del cuerpo un radioisótopo administrado a través de una inyección. El equipo utilizado para realizar todo este trabajo se denomina PET/CT y combina en un mismo aparato el tomógrafo por emisión de positrones (PET) con un avanzado tomógrafo computado multicorte (CT), permitiendo generar imágenes de alta resolución en 2D, 3D y 4D que se aplican al estudio neurológico, cardiológico y oncológico. Al respecto, la Primera Etapa del Plan Nacional de Medicina Nuclear prevé una inversión estimada en PET/CT de AR$ 174 millones, teniendo en cuenta que de los 23 PET existentes sólo 2 son públicos.

A continuación se aprecia una tabla en donde podremos ver que en la actualidad la mayor cantidad de PET se encuentran ubicados en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y la provincia de Buenos Aires (18), seguido por la región Pampeana (4) y Cuyo (1) quedando las zonas del Nordeste, Noroeste y Patagonia pendientes. Una vez que el Plan Nacional de Medicina Nuclear haya completado todas sus etapas, la CABA y la provincia de Buenos Aires sumarán 2 PET adicionales a los 18 existentes, la región Pampeana sumará 4 a los 4 existentes, la región Cuyo sumará 2 más al único existente, pero para las regiones Nordeste, Noroeste y Patagonia llegarán un total de 14 PET, lo cual representará un cambio rotundo para sus habitantes ya que hasta el día de hoy no cuentan con ningún equipo.


Fuente: Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios.

Otra técnica utilizada para generar el ciclo de producción de radioisótopos es la Tomografía Computarizada de Emisión Monofotónica (SPECT). El procedimiento es similar al del PET, pero en la SPECT es el isótopo el que produce directamente el rayo gamma. La ventaja comparativa del SPECT/CT respecto del PET/CT, es que emplea los radioisótopos clásicos de la medicina nuclear, de bajo costo y de alta disponibilidad, más fáciles de obtener y de vida media más larga para aplicarlos al estudio neurológico, cardiológico, óseo, renal, pulmonar, digestivo, venoso y linfático. En este sentido, a través de la Primera Etapa del Plan Nacional de Medicina Nuclear se estima una inversión en SPECT de AR$ 60 millones.

A continuación, podemos apreciar otro cuadro donde aparecen la cantidad de SPECT por región argentina. Veremos que hay una mayor equidad de equipos comparado con los PET pero la mayoría de ellos se encuentran también ubicados en la CABA y la provincia de Buenos Aires (136), seguida por la región Pampeana (46), Cuyo (10), Nordeste (9), Noroeste (14) y Patagonia (9). Una vez que el Plan Nacional de Medicina Nuclear haya completado todas sus etapas, la CABA y la provincia de Buenos Aires seguirán teniendo sus 136 SPECT pero para la región Pampeana, Cuyo, Nordeste, Noroeste y Patagonia se sumarán un total de 22 equipos.


Fuente: Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios.

Finalmente, en cuanto a la fase de tratamiento, la medicina nuclear utiliza la Radioterapia basada en el empleo de radiaciones ionizantes (rayos X o radioactividad, la que incluye los rayos gamma). La Radioterapia se divide en "externa" (donde la fuente de irradiación se encuentra a cierta distancia del paciente) e "interna" (consiste en la colocación de fuentes radiactivas encapsuladas dentro o en la proximidad de un tumor). La inversión en equipos de Radioterapia Externa, siempre en el marco de esta Primera Etapa del Plan de Nacional de Medicina Nuclear, será de AR$ 670 millones; en equipos de Radioterapia Interna ascenderá a AR$ 70 millones.

Tal como se muestra en el cuadro siguiente, cuando el Plan Nacional de Medicina Nuclear se encuentre totalmente ejecutado se sumarán 11 equipos más de Radioterapia Externa a la CABA y a la provincia de Buenos Aires. Por su parte, la región Pampeana, Cuyo, Nordeste, Noroeste y Patagonia habrá sumado un total de 42 equipos.


Fuente: Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios.

En cuanto a los equipos de Radioterapia Interna destinados a la CABA y a la provincia de Buenos Aires serán 17, mientras que para la región Pampeana, Cuyo, Nordeste, Noroeste y Patagonia totalizarán 26 equipos.


Fuente: Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios.

Primera Etapa del Plan Nacional de Medicina Nuclear
La inversión total de esta primera fase será de AR$ 4.300 millones y se destinarán a los Centros de Medicina Nuclear ya operativos como la Fundación Escuela de Medicina Nuclear (FUESMEN) de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), el Instituto A. H. Roffo de la Universidad de Buenos Aires, el Centro de Medicina Nuclear del Hospital de Clínicas, el Centro Atómico Ezeiza de la CNEA y la Fundación Centro de Diagnóstico Nuclear (FCDN) de la CNEA, como también a la ejecución de un centro de diagnóstico y tratamiento en cada región del país. Los centros proyectados son los siguientes:
- el Centro de Medicina Nuclear en Formosa que atenderá a toda la población del NEA y al que seguramente también se acercarán los hermanos de la República del Paraguay, el cual está próximo a inaugurarse en Octubre de este año;
- el Centro de Medicina Nuclear en Santiago del Estero que se encuentra en pleno proceso licitatorio y atenderá en la región del NOA;
- el Centro de Medicina Nuclear y Molecular - Oro Verde en Entre Ríos que tiene un grado de avance de obra del 60% y que abrirá sus puertas en Agosto de este año;
- el Centro de Protonterapia / Polo Oncológico Nacional en la CABA con una inversión de AR$ 930 millones;
- el Centro de Medicina Nuclear en La Pampa que está tratando en la legislatura provincial correspondiente la cesión de su terreno y atenderá a la región Centro del país;
- el Centro de Medicina Nuclear y Radioterapia de San Carlos de Bariloche en Río Negro que atenderá a la Patagonia Norte y prevé inaugurarse en dos partes, una en Octubre y otra en Diciembre de 2015; y;
- el Centro de Medicina Nuclear de Río Gallegos en Santa Cruz que atenderá a toda la Patagonia Sur y seguramente también a la población chilena de Punta Arenas, abriendo sus instalaciones en Octubre del corriente año.

Cabe agregar que son dos los centros que todavía están en etapa de proyección: el Centro de Medicina Nuclear en el NOA y el Centro de Medicina Nuclear Comodoro Rivadavia en Chubut.

Además, cada uno de estos Centros de Medicina Nuclear contará con equipos de trabajo de 25/30 personas garantizando una fuente laboral genuina para cientos de profesionales: médicos, médicos nucleares, físicos, médicos físicos, ingenieros, ingenieros nucleares, bioingenieros, químicos, radio químicos, farmacéuticos, radio farmaceutas, bioquímicos, biólogos, biólogos moleculares, científicos computacionales, biólogos computacionales, etc.

La Ciencia al servicio del Pueblo
El Plan Nacional de Medicina Nuclear lleva invertido en obras y equipamiento entre los años 2004 y 2014 un total de AR$ 156 millones encontrándose dentro de sus grandes hitos la inauguración de la FCDN en 2007, la cual cuenta con equipos PET/CT, ciclotrón y laboratorio de radiofarmacia; la adquisición de un equipo de resonancia magnética nuclear de alto campo para la FCDN en 2010; la instalación de un acelerador lineal, un resonador magnético nuclear, un ecógrafo, un resonador de alto impacto y un tomógrafo multicorte para la FUESMEN en 2011; la adquisición de una Cámara Gamma/SPECT para la FUESMEN en 2012/2013 y el inicio del desarrollo de un PET de tecnología nacional que se estima será finalizado este 2015 y, finalmente, la incorporación de un equipo PET/CT, la actualización de un ciclotrón y una cámara gamma para la FUESMEN, como así también la incorporación del primer PET/CT de alta precisión en diagnóstico precoz del cáncer de mama (primero de América Latina e instalado en hospital público), un acelerador lineal y un SPECT/CT para el Instituto Oncológico Ángel Roffo, todo esto durante el año 2014.

Teniendo en cuenta los logros y proyecciones que el Plan Nacional de Medicina Nuclear ha desarrollado a lo largo de todos estos años es importante destacar que no sólo se encuentra cumpliendo paulatinamente con su objetivo primordial de detectar, prevenir y tratar las ENT para un número cada vez mayor de ciudadanos, que pueden ejercer mejor su derecho a la salud, sino también la generación de una articulación sanitaria a futuro genuinamente federal donde pueden participar y beneficiarse todas las regiones de nuestro extenso territorio. En suma, el Plan Nacional de Medicina Nuclear demuestra que, tal como expresaba el Dr. Ramón Carrillo, "sólo sirven las conquistas científicas sobre la salud si éstas son accesibles al pueblo".

* Investigación original: Lic. Belen Ennis (OETEC).