Fuente: ENARGAS. Informe provincial La Pampa (octubre de 2021).

Al igual que hicimos con las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Mendoza, Santa Cruz y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (ver bibliografía), analizaremos en este informe la cantidad de usuarios residenciales incorporados a la red y el consumo de gas hogareño de La Pampa. Si bien el periodo tomado por ENARGAS abarca los cuatrienios de la serie 1996-2019, pondremos la lupa en el periodo donde se desarrolló la gestión Cambiemos a nivel nacional (2016-2019).

El objetivo es verificar la expansión (o no) del servicio público de gas por redes en tiempos de tarifazo, política que supuestamente había venido a mejorar la calidad de dicho servicio a instancia de una mayor inversión por parte de las empresas. Sin embargo, comprobaremos que el cuatrienio 2016-2019 terminó con las peores cifras en materia de sumatoria de nuevos usuarios residenciales a la red y cantidades de gas consumidas por este sector.


Fuente: ENARGAS. Informe provincial La Pampa (octubre de 2021).

En efecto, y como muestra el gráfico anterior, entre 2016 y 2019 La Pampa obtuvo la cifra más baja de usuarios residenciales incorporados al servicio público de gas por redes. Medido en cantidades, la cantidad de hogares sumados fue menor a la de los años 2000-2003. Además, en términos de porcentajes, el periodo macrista arroja la segunda peor caída de toda la serie analizada por el ENARGAS (-25%).

Contrariamente, bajo la primera presidencia de Néstor Kirchner (2004-2007), el número de usuarios sumados a la red creció un 6% respecto al cuatrienio previo, tendencia que se mantienen en los cuatro años posteriores (2008-2011), con un aumento del 14%, llegando a la mayor variación de la serie. Sin embargo, entre 2012-2015, se constata una disminución del 12% respecto al periodo anterior. No obstante, el Ente destaca que "a pesar de esta pérdida de intensidad, los usuarios incorporados superan a los cuatrienios 2000-2003 y 2004-2007".


Fuente: ENARGAS. Informe provincial La Pampa (octubre de 2021).

Respecto al comportamiento mostrado por el consumo de gas en esta categoría de usuarios, el informe del ENARGAS señala que si bien en el periodo 2016-2019 se observa un incremento del 4% en relación a los cuatro años previos, "el consumo de gas natural registra variaciones positivas durante toda la serie". Cabe destacar, a propósito, que entre los mayores aumentos porcentuales se encuentran los de los cuatrienios 2008-2011 (+26%) y 2012-2015 (+28%), únicamente superados por el periodo 2000-2003 (+43%).

Finalmente, es importante resaltar que, en el año 2020, con la política energética y tarifaria del Frente de Todos, que congeló los aumentos de tarifas, intervino el ENARGAS, decretó la esencialidad de los servicios públicos y suspendió la RTI de Cambiemos, se verá una formidable suba del 10% interanual en el consumo de gas residencial de La Pampa. Esto, luego de la caída del 1% que experimentara en el último año de gestión neoliberal (1).

Conclusión
¿Por qué recordar estos datos contundentes? Porque creemos que es absolutamente necesario en el debate de modelos que se juega en las elecciones del próximo domingo. Todavía mucho más, considerando el resurgimiento del modelo neoliberal en las PASO y la posibilidad de que éste gane terreno en el Congreso.

Discutir qué tipo de servicios públicos y que política energética y tarifaria queremos (y necesitamos) las y los argentinos para salir adelante nos parece medular, estratégico y absolutamente impostergable. Porque estamos seguros y seguras que el camino no es volver para atrás en esta materia y que la energía debe ser considerada un derecho, promotora de otros derechos humanos y de la mejora en la calidad de vida ciudadana.

Ya vimos cómo el neoliberalismo dilapidó la función social de la energía, mercantilizando sus servicios públicos. El caso de La Pampa, como el del resto del país, donde se observan los peores datos en cantidades de usuarios incorporados a la red y niveles de consumo entre 2016 y 2019, son una muestra acabada de lo que sucede cuando el mercado administra el país. Y a eso, a una energía variable de ajuste, empobrecimiento y exclusión, a una energía convertida en un bien de lujo, vaciada de contenido humano y de justicia social, no podemos volver.

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(1)
Fuente: ENARGAS. Informe provincial La Pampa (octubre de 2021).