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| Artículos de opinión

El mundo debería sentirse satisfecho y celebrar un nuevo paso de la Argentina nuclear

Autor | Wade Allison


Palabras Claves
Argentina, Atucha II, cambio climático, Fukushima, industria nuclear, Plan Nuclear Argentino, residuos, Wade Allison



04-03-2015 | La tierra es un planeta pequeño y superpoblado, con una atmósfera delgada amenazada por las emisiones de carbono. Son muchas las naciones que están avanzando en el suministro de fuentes de energía limpias y abundantes. Y ninguna fuente de energía es tan abundante, tan segura ni tan limpia como la nuclear, así que todos debemos estar complacidos de que la Argentina tenga ya su nuevo reactor suministrando energía eléctrica y planes firmes para construir dos reactores nucleares más. [Nota del editor = Profesor Emérito de la Universidad de Oxford y físico de la Organización Europea para la Investigación Nuclear ].


¿Serán seguros? Fukushima fue una prueba suprema y resultó completamente segura. No hubo una sola muerte, incluso para un reactor de 40 años de edad y con toda la tergiversación y el sensacionalismo mediático en contra. Usted podrá escuchar a la gente lamentarse: "¿pero qué pasa con los residuos?". Resulta increíble, pero no por eso menos cierto, que no hay residuo alguno. Debido a que la energía nuclear produce un millón de veces más energía por kilogramo de combustible, comparado con la quema de combustibles fósiles, necesita un millón de veces menos combustible por año y produce un millón de veces menos "residuos". Para la mayoría de las centrales nucleares, los residuos que alguna vez produjeron están almacenados en condiciones de total seguridad en las mismas centrales que lo generaron. Tarde o temprano serán reutilizados. Y nadie ha muerto por residuos nucleares; a propósito, lo peor que puede decirse de ellos es su excesivo mal empleo por parte de los medios y los activistas anti-nucleares. Con información oportuna y precisa esta actitud irá decayendo.

En fin, el mundo debería no sólo sentirse satisfecho por la noticia de una Argentina expandiendo su provisión de energía nuclear, sino también celebrar que está desarrollando una industria capaz de ayudar a otros países a seguir sus pasos.